El mejor regalo de estas navidades para los «más pequeños» de la casa. Muñecas y peluches.
¿A quién no le gusta abrazar a un dulce peluche? o ¿quién no mira con amor una bonita muñeca?. Es un sentimiento que se despierta en nosotros siempre, por muy mayores que seamos.
Peluches que enamoran
Un bonito peluche es para siempre.
Hay peluches que cuando caen en tus manos, por una extraña razón, ya no puedes dejar de acariciarlos, de achucharlos, de abrazarlos y aflora en ti esa ternura que sentías por ellos cuando eras pequeño.
Pero…. ¿es que acaso los peluches tienen edad?. Nuestra experiencia de años detrás de un mostrador nos dice que NO. Efectivamente, los peluches son los regalos mas elegidos para ocasiones especiales. Ocasiones en las que quieres demostrarle a la persona a la que se lo regalas, que es importante para ti, que la quieres, que la extrañas, que la adoras, en definitiva, que deseas achucharle como a ese peluche que le acabas de regalar.
Muñecas para crecer
Y si hablamos de muñecas, de esas muñecas de toda la vida, con esa goma que huele a vainilla y cuando abres tu regalo lo primero que haces es olerla porque…..¡como huele!. Esas muñecas hacen que los niños y niñas desarrollen su imaginación y creatividad, que serán su fiel compañero de aventuras y que les enseñará a ser responsable.
Muñecas y muñecos para que todos los niños puedan jugar de manera igualitaria, sin ningún tipo de complejos, ni distinción de raza o sexo. Atrás quedo lo de «las muñecas para las niñas», porque las muñecas son para jugar, niñas y niños.
Nos encanta que las muñecas aporten valores de igualdad, empatía y tolerancia. Apostamos por ello.
Cuando tienes que hacer un regalo a un niño, ¿alguna vez te paras a pensar en lo que podemos llegar a aportar con él?, ¿los valores que quieres inculcar?, ¿cómo puede ayudarle a crecer y en que aspectos?. Son preguntas que deberíamos hacernos y la mayoría de las veces las pasamos por alto.
Un buen regalo para un niño, es el que, además de juego y entretenimiento, le proporciona una serie de beneficios para su persona que, sin él darse cuenta, le está ayudando a crecer emocionalmente, a nivel afectivo y psicológico, creando una persona que el día de mañana sabrá tomar decisiones validas y coherentes.
Porque un buen juguete es un buen regalo